En 2009, un equipo de cirujanos plásticos británicos hicieron el primer transplante de pestañas en UK. La micro-cirugía fue conducida por Transform, la más grande empresa de cirugía cosmética en el Reino Unido.

Fue la solución definitiva para la madarosis (pérdida de pestañas) provocada por el desorden de tricotilomanía (obsesión compulsiva de arrancarse el cabello) para Louise Thomas, una joven de 19 años de Stockport, Greater Manchester, quien, 17 años después de sufrir ese desorden, carecía totalmente de pestañas.

La operación llevó 4 horas y fue hecha con anestesia local. Se comenzó tomando un mechón de pelo de la nuca, diseccionándolo bajo un microscopio y ubicándolo con pequeñas incisiones en los párpados..

La paciente pagó aproximadamente 3,500 libras esterlinas.

Esta operación es indicada para quien sufre de alopecía, tricotilomanía o pérdida de cabello por quimioterapia.

Las pestañas transplantadas toman volumen de 4 a 6 meses luego de la operación.

Shami Thomas, quien condujo la operación, dijo que el procedimiento resultó seguro y exitoso. El transplante de pestañas está actualmente muy difundido en EEUU.